Este martes 26 de noviembre, en el auditorio de la Cámara Nacional de Comercio, se presentó el "Modelo de Participación e Integración Laboral para Jóvenes en Desventaja Social del eje troncal", una propuesta diseñada, por el equipo de GERENSSA, a requerimiento de la Fundación Munasim Kullakita, con la participación de Giaffar Hassem Leyton, Director de la Dirección General de Empleo del Ministerio de Trabajo, Andrea Ulloa, Presidenta de la CAMEBOL, María Cristina Soto, Presidenta de la CAINCO El Alto, Omar Paz Coord. SEDEM, el representante de Cáritas Alemania en Bolivia, y la Subdirectora de la Fundación Munasim Kullakita.
El documento se encuentra estructurado en tres partes: el primero “Un estudio de Mercado Laboral” que es analizado a partir de la oferta de talento humano, identificando las barreras y oportunidades que jóvenes en desventaja social enfrentan dentro del eje troncal de Bolivia. El documento evidencia un predominio de la informalidad laboral, debido a la baja generación de empleos formales, de los actuales sectores clave de la economía, como la minería, el gas y la agricultura, en consecuencia, la juventud en general se enfrenta a una alta. Prevalencia de explotación laboral, informalidad y precariedad.
Los Hallazgos clave identifican que: (i) los sectores con mayor potencial laboral son, actualmente, la gastronomía, ingeniería comercial, manejo de redes y hotelería; (ii) las microempresas dominan el mercado, pero ofrecen empleo informal y limitado; y (iii) los testimonios de jóvenes destacan experiencias de explotación y barreras de acceso al empleo formal.
La segunda parte del documento es el “Estudio de Demanda Empresarial” que identifica las tendencias laborales y sectores con potencial para la inclusión de jóvenes formados por la Fundación. El documento plantea la necesidad de: (ii) implementar políticas inclusivas que fortalezcan las alianzas estratégicas para reducir la brecha entre oferta y demanda laboral; y (ii) continuar con la promoción de habilidades blandas y competencias técnicas adaptadas al mercado laboral, en este sentido, las alianzas empresariales con las instancias formativas, es de vital importancia.
Finalmente, la tercera parte, el "Modelo de Participación e Integración Laboral para Jóvenes en Desventaja Social del eje troncal” responde a un contexto de alta informalidad y precariedad laboral en Bolivia, agravado por barreras estructurales como la exclusión social, la baja productividad del sector. privado y la desconexión entre la oferta educativa y las demandas del mercado.
El modelo está fundamentado en el pensamiento complejo (ECO2) y la interseccionalidad, lo que le permite abordar las múltiples dimensiones de la exclusión social (género, etnicidad, nivel educativo, condiciones familiares).
Un factor fundamental para garantizar la sostenibilidad y escalabilidad del Modelo es que el Ministerio de Trabajo se constituya como garantía generador de políticas públicas laborales para la juventud, a partir de las siguientes acciones: (i) modificación del DS 1322 para Ampliar Oportunidades de Pasantías; (ii) alineación de Capacidades con Necesidades Empresariales específicas; (iii) conformación de una Unidad Operativa como NEXO Entre Empresas, Centros de Formación y Jóvenes que además sea responsable del manejo, mantenimiento y actualización constante de una Bolsa de Empleo Cualificada; y (iii) el fortalecimiento de la Articulación Interinstitucional, intersectorial e Intergubernativa.
El éxito de vincular al sector empresarial público y privado radica en la construcción de incentivos que se señalan a continuación; (i) El Sello Inclusivo. Éste puede mostrar la vinculación de la empresa con la comunidad, mostrando a empresas inclusivas que aportan al desarrollo local a través de proyectos en alianzas públicas privadas; (ii) Reducción impositiva que se constituye en un fuerte incentivo para las empresas, esta es una propuesta que debe ser desarrollada, que gozaría de un apoyo importante para la concreción del modelo propuesto; (iii) La bolsa de trabajo cualificada con la capacidad de filtrar demandas y ofertas laborales, desde un enfoque de interseccionalidad, aportando de manera decisiva en la colocación del empleo juvenil; (iv) jóvenes capacitados/as en el marco de una articulación con las necesidades del mercado y a las necesidades formativas de las y los jóvenes que son ampliamente diversas.